Son las 7 de la mañana, partimos hacia Navarra para recoger al 3er componente del grupo. Una vez el equipo estuvo al completo ponemos rumbo a tierras Aragonesas.
Hemos quedado para equiparnos en Puente la Reina. Una vez tenemos el material, toca decidir en que berenjenal nos vamos a meter, bueno en este caso, en que barranco nos meteremos.
Aprovechamos para desayunar ricos bollos...ummmmmhhh, mientras terminan de decidir. Finalmente iremos al Hospital, no hay más opción, hay previsión de agua y el cielo se muestra oscuro.
Nos adentramos en el valle de Hecho, vistas a los pirineos...buen ambiente, buena compañía...todo apunta a que nos lo pasaremos genial!!! Mirad nuestras caras:
Una vez todos estuvimos equipados realizamos la corta aproximación hasta el rio. Alli breve pero obligada explicación...y nos metemos al lio.
Pequeños destrepes, para llegar al primer tobogan. Yo ya le hecho el ojo a una repisa desde la que me parece es posible el salto. Mikel, nuestro guia, me da permiso. Sucesión de pequeños saltos, un par los hacemos de espaldas, y llegamos a una cascada que parece un gran tobogan. Le miro al guia y enseguida me dice: "tobogan NO, aqui lo rapelamos por fuera de la manga de agua. "
Mi cara de pena le hizo plantearse su decisión y me dijo: "venga quieres bajartelo" y yo "SIIIIII" pues ala "lo vas a porbar tu" y luego me dices que tal.
Hice el tobogan en forma de rapel en oposición. Unos 17-18 metros por una cascada con bastante caudal, para llegar a una semi-cueva escalonada.
La siguiente cascada la rapelamos, algunos hasta la mitad y luego poniendo un lateral del cuerpo nos resbalamos a modo de tobogan vertical por la manga de agua: muyyyy guapo!!! Aqui una foto de la cascada (donde esta el tio, ya bajamos deslizando).
El barranco en si no es largo ni complicado, tiene un salto de unos 6-7 metros bonito, ya que se salta desde una roca lateral, hicimos un pequeño sifón, y más toboganes. El último muy guapo.
Barranco ideal para iniciarse pero que no llega al nivel de Fago, ni paisajisticamente ni por actividad-adrenalina.
Nuestra jornada continúa, toca comer, y ya que estamos en el Valle de Hecho, pues decidimos comer en el pueblo que le da nombre. Pueblos preciosos como podéis comprobar:
Tras dar una vuelta por el pueblo, toca reponer fuerzas, ya que las galletas están bien, pero no sólo de galletas vive el hombre. Y donde esten unos buenos huevos fritos con patatas y butifarra casera...que se quiten las galletas. Aunque la ensalada estaba buena la torrija del postre...ummmmhhh. Como nos cuidamos ¿que no?
El tormentón que cayó mientras nos avituallábamos fue elegante. Los planes para la tarde quedaban claros. Tranquilidad y turismo.
Asi que tras llegar a Murillo, no sin echar unas buenas risas en el camino, nos acercamos al albergue y nos pegamos la merecida ducha.
En la calle seguía lloviendo, asi que nos acercamos a Riglos, guía en mano, para ver futuros proyectos. Parecíamos escaladores de los buenos y todo.
Al anochecer nos cobijamos en el agroPub. No os perdais sus ricas hamburguesas...joder vaya crónica, parece más culinaria que otra cosa. Jarras y jarras de lejia nos amenizaron la tarde-noche, además de la compañía de peña Euskalduna (alguna que otra conocida).
Y toca retirarse, el día ha sido largo, pero nos queda una jornada con buena previsión de tiempo, asi que hay que dormir.
A Carro se le da bien eso de dormir y si no, mirad la foto:
Hace bueno, cielo azul, buena previsión asi que tras quitarnos las telarañas y desayunar, nos acercamos a Riglos para hacer la Ferrata de Cubillos. Carro se inicia en este mundo y aunque no es una gran vía, no esta mal como toma de contacto. Es como hacer una circular dominguera con unas vistas impresionantes.
Por el camino de aproximación coincidimos con dos célebres personajes. Uno de ellos es Gregorio Villarig (toda una institución en el mundo de la escalada en Riglos, donde lleva escalando 50 años). Mantuvimos una enriquecedora conversación con él y su amigo, que iban a pasar todo el día equipando un proyecto...eso si que es tener ilusión.
Y casi sin querer nos encontramos con el inicio de la vía. Mucho más verde el paraje que hace unos años, cuando estuve con Serrano. Nos equipamos y para arriba. La cosa va fluida, salvo por llevar una mochila de 9 kgr.
Para Carro es su primera vez, pero progresa con facilidad, parece moverse bien en esto de las alturas, y lo mejor de todo, se lo pasa bien:
La ferrata es breve, pero como he comentado las vistas merecen mucho la pena. Desde arriba podemos admirar los Mallos de Riglos, los de Aguero y Peña Rueba. No nos detenemos mucho, hay que aprovechar el día. Teníamos intención de rapelar la ferrata, pero Gregorio y Alejandro nos recomiendan descender y cerrar la circular por el camino equipado, que definen como "muy divertido".
En la anterior ascensión de esta vía cerramos la circular con una kilometrada, ya que los carteles que supuestamente indicaban el descenso, simplemente no existían. Ahora está todo muy bien indicado. Y el descenso pues, mejor le oís a Carro, todo un experto en la materia:
Tras terminar la cicular, comemos al sol observando a los intrepidos trepadores que llevan toda la mañana apretando en las rojas paredes.
De aqui y sin más dilaciones, nos volvemos a tierras navarras para reencotrarnos con Hector y escalar juntos en Peñartea.
Aqui acabaría nuestra jornada, no tuve mi día, encadenamos 3 vías fáciles, iniciamos a Carro en esto de la roca y Hector (que minutos más tarde se llevaría un golpe majo) y yo mismo probamos un 6a"Zuzenean" en el sector Pacha (buen nombre, aunque no vimos ninguna GoGo). La vía dura, como supongo, todos los 6a cortos, muy bloquero, son 4-5 chapas. Pero bueno ahi esta, ya volveremos. Aqui Hector (gran asegurador y animador, si no es por el no subo el 6a) y Carro en su estreno:
Y esa es la idea, volver a pasar más findes como este!!! Hasta otra.