Lunes 26 de agosto, 2013
Sin madrugar (esto me acarrearía
luego sudores profusos) y tras dormir como troncos tras la pequeña paliza del
día anterior, comienza nuestro periplo barranquil por el pirineo oscense.
En esta jornada nos desplazamos
hasta Hospital de Tella donde aparcaremos junto al puente. Decidimos realizar
el clásico Mirabal pero dándole un toque diferente, entrando al rio por uno de
sus afluentes y haciéndolo de sin necesidad de combinar coches.
Tras preparar los petates nos
disponemos a caminar; la aproximación se realiza por un camino que sale junto
al rio. Si nos ponemos de frente al mismo a nuestra izquierda. Una señal de
madera marca PR (marcas blancas y amarillas) e indica Mirabal / Escuaín.
El camino esta bien marcado, mis
piernas también, ya que la vegetación de la zona te araña con cariño al pasar…
Seguimos la reseña de http://www.barranquismo.net/paginas/barrancos/afluente_garganta_de_mirabal.htm
en la que indica un tiempo de aproximación de 1h 15. Nosotros tardamos una
media hora más ya que al no estar indicado, íbamos fijándonos en todo lo que
nos parecía pudiera ser la entrada al afluente.
Pero lo evidente es lo evidente y
bien dice en la reseña “El afluente a descender se
identifica bien, momentos antes de cruzarlo el camino pasa por una esplanada
característica justo en la divisoria.”
Y asi es, ya que es la esplanada
mas ancha y llana de todo el camino y unos metros después nos encontramos con
el cauce. Éste no iba seco del todo, pero su inicio es bien transitable sin
neopreno. Es bastante plano. Según avanzamos se va estrechando, para evitar un
destrepe a una poza nos desviamos por los arboles de la esquina.
En este momento decido ponerme el
peto y Gorka continúa para ver si estamos donde queremos.
Mientras el se equipa comemos
algo de fruta y voy montando el primer rapel, que teóricamente es de 8-10
metros y nos deja en una repisa. La instalación es antigua, un spit y un pitón.
Decide bajar el primero, pero no
encontramos la instalación que en el croquis entendemos como “bajo cornisa”.
Comienzan las dudas, comienzan los sudores.
Decide abandonar la repisa y
bajar algo más, pero le aconsejo no lo haga ya que no es lo apropiado. Sube a
pulso por la cuerda hasta la repisa donde se supone deberíamos montar el
segundo rapel de 26 metros.
Hablamos y le digo que vuelva a buscar.
Tras pasar mucho tiempo encuentra un cordino en un arbolito. Nos damos cuenta
de que en la reseña no ponía bajo cornisa si no “boj cornisa”.
Gorka me dice que no lo ve nada
claro, no le parece seguro.
Comienza un largo y duro debate
sobre que hacer:
-Hemos llegado y empezado tarde
por no haber madrugado y hemos tardado en encontrar el afluente.
-La instalación es precaria.
-No controlamos lo suficiente
como para autorescatarnos…
Resumen: situación limite; barajo
dos opciones. Sacar a Gorka de ahí y abandonar el plan (1) o juntar las
cuerdas, lanzar la larga (45m) y bajarle de ahí hasta lo que se supone seria el
final del rapel largo.
Parece lo mejor pero (siempre hay
un pero), no sabemos si podremos recuperar las cuerdas una vez abajo.
Tras unos momentos de calor, se
decide hacerlo asi…Gorka llega abajo, junto las cuerdas pero no quiero lanzar
la segunda para que no se lie con nada.
Para cuando comienzo a rapelar he
quemado mas calorías que Jane Fonda en una sesión de aerobic.
Llego abajo y tirando los dos con
cuidado recuperamos las cuerdas…ufff. Bueno esto ya esta,
pensamos…ilusos…pobrecitos.
El siguiente rapel sin problemas,
dos spit bien puestos. Que siga la fiesta!!!
Abandonamos la sala donde nos deja este rapel para comenzar a destrepar
a través de un largo caos de bloques.
Nos ilusionamos al oir el agua
cada vez más cerca y no hace mucho hemos oído voces de gente que lo está
descendiendo.
Pero llegamos al ultimo tramo de
caos y donde pensábamos que habría algo, no había nada. Comenzamos a buscar
algún bloque, puentes de roca, o arboles para improvisar algo.
Vemos un gran bloque de piedra
donde podría ser…pero no me convence nada, si bajamos de ahí en doble la cuerda
la perdemos…cuando ya estoy convencido de meter una cinta a un arbolito que
podría aguantar y poder rapelar los mas de 10 metros que nos dejarían en el
agua, Gorka desentierra un vetusto cordino con una pequeña anilla oxidada.
Reviso el cordino y parece estar
bien, la anilla también. Montamos ahí el rapel, pero se me pasa el asegurar la
instalación con otra cuerda atada a cualquier árbol por si fallara…mal, muy
mal.
Hay suerte nos aguanta. Ojo a la
salida del rapel, Gorka improvisó un paso de funanbulista y yo quise bajar
tanto el culo que al final me quede boca abajo pero resolvi bien.
Por fin en el Mirabal, donde no
hacia falta la cuerda…pero que hora era?? Otro error, los móviles viejos que
llevamos en el bidón estaban sin poner en hora.
No hay otra, ya no hay mas que
bajar o bajar…pero es tarde.
El agua es cristalina y el cañon
se ve precioso, sale hasta el sol para animarnos. Gorka se muestra perezoso
como siempre para mojarse. Yo me subo a una piedra y salto para entrar.
A los poco metros salvamos unos
destrepes fáciles con este caudal. El cañon se estrecha y de repente se abre,
una preciosa poza de agua ultra cristalina.
Cubre bien asi que buscamos el
salto. A nuestra izquierda y salvando un par de piedras del fondo podemos hacer
un salto de unos 6 metros.
Despues continuamos bajando y se
vuelve a estrechar. Todo el recorrido es precioso, espectacular.
Zonas con pasadizos, badinas,
estrechos…muy bonito. Llegamos a otra badina/poza donde a nuestra derecha
buscamos otro salto de unos 6 metros. A Gorka se le escapa la mochila y yo
aprovecho para saltar de nuevo pero desde mas atrás y mas alto.
Vemos que justo en frente hay un
pasamanos que nos dejara en una repisa bien buena para saltar desde unos 8
metros.
Hubiesemos repetido pero vamos
justos de tiempo asi que para abajo. El cañon se abre y caminamos y nadamos
algo.
Decidimos parar a comer sobre
unas rocas fuera del agua. Comemos rápido y de un salto otra vez al agua.
Bajamos con buena dinámica. Pero
la luz empieza a bajar de tono, el cielo se nubla y vemos al sol bastante bajo
tras las nubes.
Continuamos bajando por la
garganta. Ya llevamos unas cuantas horas…y yo de repente noto que ya no voy
fino.
El rio se convierte en rio
abierto y comenzamos a buscar un posible camino de salida. Otra vez divagamos.
Seguimos caminando por el rio,
pero hay que hacerlo un rato largo; largo que para mi fue eterno. Intentando
caminar por fuera del agua, ya que entre el bajon de txitxa, el neopreno, la
mochila con la cuerda mojada….cada vez me costaba mas salir del agua.
No paraba de sudar, sudar y
sudar. Gorka me iba sacando cacho. A las malas aun nos quedaba algo de beber y
comer y se podía salir del agua. Estimabamos que podrían ser las 8.
De repente Gorka se gira y me
dice: un pescador!!! Mientras el se acerca yo me termino el aquarius.
El hombre nos dice: es precioso
este rio eh!!! Y si que lo es si, pero que hora es?? Las 18:30, buenas palabras
caballero. No le di un beso porque iba muy sudado y es de mal gusto, ya se
sabe.
Minutos mas tarde encontramos el
camino a nuestra izquierda ssiguiendo el curso del rio. Y poco después, tras
subir unos metros caminamos cerca de la carretera.
En breve llegamos al punto de
inicio. Me siento y pienso que hemos tenido suerte, bastante suerte.
Como y bebo y de mientras me
quito la pesada piel gomosa que llevo encima y aun sigo sudando a grifo
abierto.
Al rato comienzo a encontrarme
mejor. Han sido 7 horas, muchos minutos bien largos. Muchas lecciones
aprendidas.
El cañon precioso, y una idea
pendiente: la de volver al afluente a renovar y equipar, ya que pensamos merece
la pena; a ver que podemos hacer.
Aun nos quedaba 1 hora de vuelta
hasta la ducha caliente…esta vez lo hicimos por Ainsa y sus mejores carreteras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario